4 consejos para coger peso sin dañar tu espalda

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A lo largo de nuestra vida afrontamos un buen número de momentos y situaciones que nos obligan a tomar peso. De hecho, existen personas acostumbradas a coger grandes pesos por cuestiones de trabajo. Por esta razón saber cómo coger correctamente un determinado peso es fundamental si quieres mantener protegida tu espalda, evitando posibles lesiones. Ya sea en tu trabajo o realizando labores domésticas, un mal movimiento o sostener más peso de la cuenta puede pasarte factura. Por eso, hoy te traemos 4 consejos para coger peso sin dañar tu espalda.

Distribución inadecuada del peso, malas posturas o elevar una carga, desde el suelo y sin las debidas precauciones… son algunos de los gestos cotidianos que pueden acabar dañando nuestra espalda o columna vertebral.

Y es que cuidar nuestra espalda depende en gran parte de nosotros mismos y de prestar especial atención a pequeños detalles de nuestro día a día. Porque de lo contrario aparecerán los tan temidos “tirones”, pinzamientos o contracturas que pueden afectar a la musculatura de la espalda o, peor aún, a las vértebras que forman la columna, si se actúa de manera incorrecta a la hora de coger un objeto y elevarlo para su traslado.

Consejo nº 1: la clave está en las piernas

Recuerda que, cuando levantamos un peso, la fuerza no está en los brazos o en la espalda sino en nuestras piernas. Ells son las encargadas de mamntener el equilibrio de todo nuestro cuerpo, así que cuando quieras levantar un peso no arquees la espalda. Es mejor que flexiones las piernas ligeramente hasta llegar al objeto y poder levantarlo con normalidad.

Consejo nº 2: reparte el peso en las dos manos.

Inconscientemente, y dependiendo de si somos diestros o zurdos, tenderemos a coger los pesos con una mano u otra. Es algo intuitivo. Pero llevar todo un peso en un lado de la espalda es un gran error que debemos corregir, intentando repartir el peso a transportar en los dos lados de una forma equitativa.

Consejo nº 3: presta atención a tu respiración y al descanso

Aunque le prestemos menos atención de la debida, mantener una adecuada respiración, llenando el diafragma de aire, hará que la presión del abdomen se reduzca en el momento de levantar un gran peso. 

Por otro lado, si debes repetir diferentes levantamientos de carga es recomendable que hagas determinados descansos entre un peso y otro ya que, de lo contrario, terminarás con una sobrecarga de los músculos y un debilitamiento de los mismos y repercutiendo directamente sobre tu espalda.

Consejo nº 4: especial cuidado en mayores y embarazadas.

Las personas mayores son las que más cuidado deben tener a la hora de levantar peso. Sobre todo, a la hora de subir cargados de peso por escaleras, cuestas o rampas. Por todo ello lo más recomendable es usar ascensores, así como un carro de la compra en vez de bolsas. Y si queremos ir un paso más allá y reducir al máximo las posibilidades de sufrir un tirón o pinzamiento podemos optar hacer por hacer la compra en un súper que nos ofrezca el servicio de entrega a domicilio.

En cuanto a las mujeres embarazadas, y aunque es cierto que el embarazo no es una enfermedad, es obligatorio establecer ciertos límites en algunas tareas por su seguridad y la de tu bebé. Y una de ellas es la recomendación de no levantar objetos pesados durante la gestación. De hecho, el peso máximo dependerá de la etapa del embarazo, la frecuencia del esfuerzo y la manera de levantarlo.

Nuestra recomendación es que, si estamos embarazadas, no levantemos peso alguno y pidamos a otra persona que lo cargue, sobre todo si estamos ya en el tercer trimestre de gestación porque podemos correr el riesgo de sufrir un parto prematuro, sufrir una hernia o una caída.

¿Cómo debemos agacharnos adecuadamente para levantar pesos?

Para agacharnos bien debemos seguir tres consejos muy simples. Pero, antes de nada, recuerda que siempre debemos hacer que los músculos trabajen más que nuestra columna para evitar así la presión sobre los discos. Esta forma de agacharnos para cargar objetos puede llegar a ser más cansada, pero con practica se vuelve más natural y menos cansada.

Recomendaciones para agacharnos correctamente:

  1. Dobla o flexiona la cadera y las rodillas a la hora cargar el peso. Recuerda: cuánto más músculos trabajen, menor será la presión sobre los discos. 
  2. Saca los glúteos hacia atrá para mantener la curvatura natural de la espalda.
  3. En el caso de no tener estabilidad suficiente para coger el peso, podemos apoyar una rodilla en el suelo y mantener así la espalda lo más recta posible.